miércoles, 3 de septiembre de 2008

Madrid

Levito con los pies en el suelo cuando me desplazo entre sus recodos. Las calles son bellas y el cielo nunca termina de teñirse de un color determinado. Las mañanas son calurosas en verano, y muy frías en invierno; pese a que nunca terminan de tener un clima concreto. Es ambigua, la ciudad a la que se viene a olvidar, quién sabe qué. Dando un paseo observo un zapato colgado en una reja, quizás sea el de Cenicienta, pienso. Las pequeñas calles del barrio de Malasaña me relajan, me llevan a un paseo mucho más tranquilo. Continúo: Retiro, Lavapies, Chamberi...
En esta ciudad el verano es, a veces, perfecto: las calles están vacías (todo el mundo huye a la playa) y se puede caminar sin verte dentro de una aglomeración de turistas y castizos. Otras veces no: el calor es insoportable. Por su parte, el invierno tarda en llegar un suspiro, y todos los años llega practicamente en dos días, y sin apenas avisar. A pesar de todo, me gustan los inviernos en Madrid. Ver caer la noche en un día lluvioso es bello y muy cinematográfico, mucho más si es desde el cristal del tren.
Adoro esta ciudad, aunque a veces sufro un brote de odio hacia ella y quiero dejarla atrás en mi camino, huir a otros mundos y otras villas. Sin embargo siempre deseo volver cuando estoy lejos, volver a ver sus calles, sus gentes; sentir su ambiente, oler la lluvia sobre sus losas; leer en sus parques... Como dice Ismael Serrano, y coincidiendo con la vuelta de Septiembre: Maldita ciudad, no es tu mejor momento y aún estás hermosa. He de confesarte que te eché de menos. Agarro la guitarra y canto para ti. Qué bueno estar en casa. Vuelvo a Madrid.
Y pronto volverá el otoño...

4 comentarios:

MoT dijo...

Poco a poco descubro más rincones... pero tristemente soy al reves que tu... conozco otros lugares, viajo, y deseo tener unos dias para hacer turismo en mi ciudad, conocer mis calles, como ellas me han conocido a mi desde que naci.



Me encanto que escribieras por ella de esta manera tan bonita. Una vez, yo escribi un poema.


Un besin cuentacuentos

MoT dijo...

y me dices eso tu a mi... que escribes cuentos dia si y dia tambien, y lees, mejor dicho, devoras libros en cortos espacios de tiempo... no le encuentro explicación, y te admiro mucho por ello!! :) cuánta facilidad!!

Doxa Grey dijo...

Madrid, si le dejas, te coge y no te suelta. Madrid, para mí, es teatro, es cine antiguo, es pasear por avenidas, es el Jardín Botánico bajo el sol de otoño, es el Retiro en cualquier época (aunque con lluvia, no tiene precio), es diversidad, es café, es Plaza de Oriente, risas, conciertos. Es el Metro en hora punta y los codazos en Gran Vía, pero también es... eso, Madrid. Que se desvela poco a poco, la muy....

Jesús V.S. dijo...

María: Pues debes conocer los rincones de tu ciudad, que tiene algunos que son preciosos. Se puede hacer sin necesidad de no viajar a otras. Gracias por tus comentarios.
Un beso! :)

Rosalie: Madrid para mi es todo eso que tú dices, y más. Y claro que te coge si la dejas, pero lo hace con cariño. Me gusta Madrid, la muy...
:) Gracias a ti también.