Después de casi un año volvemos a encontrarnos. Esta vez algo es diferente: tenía, por lo menos, el doble de ganas de estar de pie frente a tu inmensidad. Además necesito algo de ti: que me ayudes. Este año en que no te he visto ha transcurrido lento y cargado de cosas nuevas e inesperadas, sobre todo estos últimos meses; siento no haber podido contartelo antes, espero que sepas perdonarme. Por esta razón, hoy frente a ti, me encomiendo a tu consejo.
Nadie sabe cuanto deseaba este reencuentro. Bueno... quizás alguien si que lo supiese. Anhelé a menudo que volvieses a rozar mis tobillos, como si me tratases de pedir algo; para terminar abrazándome después...
Ese abrazo con sabor a sal, humedad y arena...
Escrito el día 21 de Julio de 2008 en Punta Umbría (Huelva), frente al mar.
Nadie sabe cuanto deseaba este reencuentro. Bueno... quizás alguien si que lo supiese. Anhelé a menudo que volvieses a rozar mis tobillos, como si me tratases de pedir algo; para terminar abrazándome después...
Ese abrazo con sabor a sal, humedad y arena...
Escrito el día 21 de Julio de 2008 en Punta Umbría (Huelva), frente al mar.
3 comentarios:
Es mi texto favorito de todos los de Huelva. Y está claro que sabías que iba a ser mi favorito.
Magnífico!
Se por el año que has pasado pero no me lo puedo imaginar. Y me das una gran alegría que aquello que se junta con el infinito, te ayudase a relajarte y a recibir ese abrazo que te merecías
Un saludo
Anónimo 1, no sabía si iba a ser tu favorito, pero si sabía que te gustaría. Gracias.
Anónimo 2, a mi tú también me das una alegría al decirme eso. Y si, ayudó, ayudó.
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